PRANCE metalwork es un fabricante líder de sistemas metálicos para techos y fachadas.
El rendimiento del aluminio frente a la corrosión en zonas costeras se debe inicialmente a la rápida formación de una capa de óxido delgada y estable (óxido de aluminio) que pasiva y protege el metal subyacente. Sin embargo, la niebla salina y el aire cargado de cloruro que se encuentran en ciudades costeras como Jeddah y Al Khobar pueden debilitar las superficies desprotegidas con el tiempo, por lo que la mejor práctica es aplicar tratamientos de superficie diseñados y conjuntos detallados para limitar la exposición. El anodizado aumenta el espesor y la dureza de la capa de óxido y es especialmente eficaz para aplicaciones arquitectónicas donde se desea un acabado metálico natural. Los recubrimientos en polvo de alta calidad formulados para entornos marinos, a menudo con estabilizadores UV y resinas flexibles, agregan una barrera adicional contra la sal, la abrasión y la decoloración. La combinación del anodizado con un sellador transparente o una capa de polvo especializada proporciona una protección dúplex que extiende significativamente la vida útil. Igualmente importante es seleccionar sujetadores y materiales para accesorios compatibles: utilice acero inoxidable de grado 316 o bronce de silicio para evitar la corrosión galvánica en los puntos de contacto. Los detalles de diseño como minimizar las grietas, garantizar un drenaje positivo y evitar el contacto de metales diferentes con acero sin tratar reducen el riesgo de corrosión. El mantenimiento de rutina (enjuagues periódicos con agua dulce e inspecciones visuales) elimina los depósitos de sal que pueden causar socavación de los recubrimientos. Cuando se emplean estos materiales y prácticas de diseño, las barandillas de aluminio brindan una resistencia a la corrosión a largo plazo adecuada para desarrollos costeros sauditas y proyectos hoteleros a lo largo del Mar Rojo y el Golfo Pérsico.